Cuando se habla de Washington no se puede dejar de lado la imagen de deslumbrantes edificios, íconos de la gran potencia económica del mundo. Y esto es cierto, pero igual de bonito y tal vez insospechado de Washington DC son también sus amplias calles con jardines, su excitante vida nocturna y la variedad gastronómica. Una capital turística, muy turística, pero con nivel se transforma en la ciudad ideal para aquellos que gustan de la historia y la movida intelectual.
Washington Distrito de Columbia (DC) es la capital de los Estados Unidos. Se encuentra ubicada en la costa este del país, sobre la Bahía de Chesepeake, cerca de las ciudad de Baltimore, Philadelphia y Atlantic City. Su relieve no manifiesta accidentes bruscos, tan sólo algunos valles.
El clima varía por estaciones, con temperaturas regualmente templadas aunque se registran casos de veranos sumamente calurosos e inviernos extremadamente fríos donde las tormentas de nieve causaron catástrofes. Sin embargo se puede decir que visitar Washington es una excelente idea en cualquier época del año.
En un primer momento el área de Washington era una tierra dedicada a las transacciones comerciales y políticas, pero poco a poco esa especie de feudo fue creciendo hasta convertirse en lo que es actualmente: la capital de uno de los países más poderosos del mundo.
Cuando Washington empezó a mostrar signos de crecimiento, el presidente homónimo contrató a un ingeniero para que diseñara la urbe. Es por este detalle que la ciudad parece a primera vista parece muy esquemática. La zona céntrica se destaca por sus anchas vías, repletas de jardines que coronan las majestuosas edificaciones que se elevan en las aceras.
A medida que uno empieza a alejarse del núcleo cosmopolita, aparecen otros barrios, primero los residenciales y luego poco a poco el nivel socioeconómico va bajando hasta acabar con el cinturón de casas de obreros.
La multiplicidad de orígenes de sus habitantes hace que algunos de los barrios de inmigrantes sumen pinceladas de color a esta gran urbe y que pongan música a sus calles. Lo mismo ocurre en el rubro gastronómico donde se destacan algunos restaurantes de comidas típicas de los lugares más exóticos del mundo. La comida internacional goza de gran aceptación, sobre todo por parte de los empresarios que se acercan a la ciudad con fines comerciales.
Washington es sin duda una de las ciudades más turísticas que tiene el país, más aún para aquellos que gusten de la historia y se sientan cautivados por los grandes acontecimientos que la construyen. Con sólo recorrerla podrán hallar en cada calle monumentos y placas, recordatorios que funcionan como huellas del tiempo. Para completar un viaje de placer, aquí encontrarán un amplio abanico de actividades culturales y sitios de entretenimiento.
Quizá el defecto más importante de Washington es su tráfico; se han hecho planeamientos especiales para intentar luchar contra este monstruo, pero resulta casi imposible. Por este motivo se recomienda armarse de paciencia y buen talante en el caso que decidas recorrerla en automóvil, ya que cada entrada o salida de la ciudad es una odisea. Resulta más práctico acudir al Metro, que es un transporte rápido y eficaz. Por otra parte y a modo de persuasión conviene aclarar que es un gran problema conseguir un estacionamiento libre. Así que no pierdas tiempo.
La fundación oficial de la ciudad de Washington DC data de 1791, y aún se conservan algunas construcciones neoclásicas de esa época en los edificios públicos. En la ciudad de los íconos estadounidenses hay pocas cosas para ver que no hayas visto en alguna película o serie norteamericana. Pero verlo en directo no es lo mismo. Aquí, un listado de lo más importante de Washington:
El Capitolio
Este famoso edificio fue construido en el mismo año de la fundación de la ciudad. Está revestido en mármol blanco y coronado por una gran cúpula. Se puede visitar y ver en su interior los distintos homenajes a los hombres que forjaron la nación. Entre los objetos que se exhiben hay diversas obras de arte, trabajadas con sumo detalle.
The Mall
The Mall es la vía principal de la ciudad. En sus aceras se levantan los monumentos y edificaciones que tan bien le sientan a Washington: el Capitolio es uno de ellos. Pero lo más pintoresco de The Mall es que toda su extensión aparece sombreada por grandes árboles que la adornan y ofrecen el respiro necesario para soportar el verano.
Smithsonian
También ubicado sobre The Mall, Smithsonian es a esta altura un complejo de museos que permiten reconstruir la historia del país. El primero es el Museo Nacional del Aire y del Espacio, donde se exhiben aviones históricos y naves espaciales originales, cohetes, maquetas de estaciones espaciales, etc. En el Museo Nacional de Historia Natural se pueden ver ejemplares de plantas y animales de todo el mundo, incluso esqueletos de dinosaurios y artefactos antropológicos. El de Historia Americana es uno de los más curiosos, con artículos de la cultura americana en el que se incluyen desde los trajes de las primeras damas hasta los zapatos rojos que usó Judy Garland en la película El Mago de Oz. En la Galería Nacional de Arte se exhibe una fina colección de arte y escultura con obras de Europa Occidental y varias pinturas americanas. Por último, el Museo y Jardín Escultórico Hirshorn cuenta con una gran colección de arte moderno y contemporáneo.Un paseo sumamente completo par conectar con el deseo de saber.
Casa Blanca
La afamada Casa Blanca es un edificio neoclásico que data del principios del siglo XIX, ubicado en la Avenida Pensylvania al 1000, dos calles al norte del Mall y muy cerca del Monumento a Washington. Recibe visitas de forma muy restringida por cuestiones de seguridad, pero tampoco es imposible acceder. Sólo debes dirigirte en persona al Centro de Visitantes de la Casa Blanca en el 1450 de Pennsylvania Avenue, de martes a sábado. Allí se otorgan un número limitado de entradas gratuitas y unicamente cuatro por persona. En el boleto verás indicada una hora específica para tu recorrido. El Centro abre sus puertas a las 7 de la mañana y las entradas se agotan muy rápido, por lo que se recomienda llegar muy temprano.
El monumento a Washington
Camino al río Potomac emerge este impresionante monumento de 185 metros de alto. Un obelisco que es otro de los emblemas de la gran capital. Es posible hacer una visita al interior del obelisco y conseguir desde allí una excelente vista de la ciudad a 150 metros de altura. En los meses de temperaturas medias a altas, el horario de visita se extiende hasta las 4 de la tarde aproximadamente, mientras que en los meses estivales el horario se reduce a la mañana. Los boletos son económicos y pueden adquirirse en un kiosko cerca de la base del monumento.
El Lincoln Memorial
En homenaje al ex presidente de los Estados Unidos que corrió la suerte de ser asesinado, se erigió un bello edificio de mármol blanco de diseño griego clásico situado en el extremo oeste del Mall, cerca de la orilla del Río Potomac y el Puente del Arlington Memorial. Dentro de la construcción se puede ver una estatua de mármol de un Abraham Lincoln de 6 metros de altura sentado. El monumento de la Guerra de Vietnam y el de la Guerra de Corea se encuentran a ambos lados de la gran piscina reflejante, justamente enfrente de este monumento. También allí se puede ver el nuevo Monumento a Roosevelt, a sólo unos cuantos pasos hacia el sur. El Monumento a Lincoln está abierto al público a toda hora del día y de la noche. Este sitio fue también testigo de los discursos del Martin Luther King.
Otras atracciones
Entre las diferentes atracciones de la ciudad se cuentan el famoso Zoológico de Washington, el Barrio Chino, el Jardín Japonés, la estación de trenes Union Station, el Jardín Botánico, la Librería del Congreso, la Basílica, la Catedral del Apóstol San Marcos, el Templo de la ciudad y muchos otros puntos de interés que no puedes dejar de visitar.
La guía
Transporte
Como hemos dicho, lo mejor para recorrer la ciudad es el servicio de subterráneos, es la manera más rápida. También pueden rentar autos o utilizar los taxis, pero el tráfico retrasa cualquier viaje por corto que sea el trayecto.
Seguridad
Los suburbios de Washington suelen resultar muy peligrosos, por lo que se recomienda acercarse a una oficina de turismo donde se indiquen las calles que conviene evitar. Lo mismo sucede con algunos bares y lugares nocturnos. En el resto de la ciudad hay que tener ciertos cuidados: es necesario estar atento para prevenir robos por distracciones o arrebatos.
Salud
En caso de necesitar un médico no dudes de acudir a los establecimientos de salud, son muy eficientes aunque pueden llegar a resultar costosos. En Estados Unidos el sistema de salud es privado.